Historia de la normativa actual
A inicios de junio se emitió una declaración que establece prohibiciones absolutas para los visitantes de 12 países —como Afganistán, Irán, Yemen y Libia— y limitaciones parciales para ciudadanos de otras siete naciones, entre las que se encuentran Cuba y Venezuela. Se justificó la acción como una protección para la seguridad del país, citando fallos en la verificación de documentos, elevadas tasas de estancia ilegal tras el vencimiento de visas y una colaboración insuficiente en procesos de deportación.
La decisión de extender la lista
Un documento interno del Departamento de Estado, firmado por el secretario de Estado, destacó 36 naciones cuyas deficiencias podrían llevar a nuevas sanciones, ya sea mediante prohibiciones completas o limitaciones parciales, si no alcanzan ciertos criterios en un plazo de seis semanas.
Los criterios esenciales son:
- Escasez de organismos gubernamentales capacitados para emitir pasaportes y otros documentos seguros.
- Altos índices de estancia ilegal una vez que las visas han caducado.
- Falta de cooperación con Estados Unidos para el retorno de ciudadanos deportados.
- Casos de terrorismo, antisemitismo o actos antiamericanos reportados en el país de origen.
El memorando les da 60 días para cooperar y proponer mejoras —con un plazo inmediato para presentar planes preliminares— o de lo contrario se activarían las nuevas restricciones.
Extensión territorial y poblacional
Los países comprendidos abarcan África (25), Asia, el Caribe y el Pacífico. Varios aliados importantes, tales como Egipto, Nigeria, Etiopía, Ghana, Camerún y Camboya, están mencionados en el listado. Este crecimiento significa una modificación significativa, ya que cerca de 1 450 millones de individuos —aproximadamente el 18 % de la población global— podrían ser impactados si los vetos se implementan completamente.
Objetivos oficiales de la administración
Según funcionarios, el propósito radica en garantizar altos estándares de seguridad migratoria, asegurar que los países cooperen en la repatriación de ciudadanos indocumentados y reducir amenazas relacionadas con terrorismo o actividad extremista. Un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional afirmó que reforzaré estos controles “ayudará a proteger el territorio estadounidense y garantizar la seguridad de nuestras comunidades” .
Críticas y controversias
La decisión ha generado críticas por ser vista como discriminatoria y demasiado severa, en particular porque muchos de los países mencionados son de África y Asia Pacífico. Críticos sostienen que es una política xenófoba con consecuencias diplomáticas y humanitarias, además de efectos negativos sobre la migración de estudiantes, el turismo y la cooperación internacional.
Impactos globales y geopolíticos
- Para los países listados: deberán corregir deficiencias en emisión de documentos, gestión de deportaciones y registros de seguridad para evitar sanciones mayores.
- Relaciones diplomáticas: se anticipan tensiones, dado que algunos incluidos son aliados históricos.
- Entorno migratorio: estudiantes, turistas y trabajadores podrían enfrentar procesos más estrictos, mayores tiempos de espera o cancelaciones de visas.
- Aspecto legal: es probable que se presenten nuevas impugnaciones judiciales, como en ocasiones anteriores.
Visiones a corto y medio plazo
- 60 días cruciales: las autoridades tienen hasta agosto para presentar sus planes de acción.
- Implementación progresiva: las prohibiciones podrían implementarse en parte o por completo a medida que se desarrolla la evaluación.
- Evaluación constante: se anticipa que este será un sistema flexible, con la capacidad de aumentar o disminuir las limitaciones conforme avance el cumplimiento.